Paje real 2009

Este año 2009, como ya viene siendo una tradición, una estupenda tradición diría yo, el Drecera estrena año llenando de ilusiones la vida un buen grupito de niños!!!. Así que una tarde me llama en Fango y me dice que si me apetece apuntarme a la primera Drecerada del año y, como no, no podía perderme la particular noche de reyes del Drecera.

Quedemos a las tres de la tarde en las instalaciones del Claret, y tras meter los coches en el patio del colegio y coger ese peazo de escalera de madera que me hizo recordar la época en que bajábamos al Avenc de la Codoleda con Electrón (pocos se acordarán de eso, en Gandhi puede que se acuerde). Nos pusimos a hablar de la variante que podíamos utilizar esta año para no tener que montar la peazo de tirolina que nos curremos el año pasado (tampoco teníamos demasiado tiempo, a pesar de que al final nos sobro tiempo hasta que el paje se tomase una birra para perder el miedo a las alturas y se comprase unas mallas nuevas, con la ayuda inestimable, colaboración estelar, de la Gemma, por si acaso el miedo le podía y se cagaba les calçes abajo).

Al final decidimos que lo mejor era aprovechar la escalera de madera para bajar desde el segundo piso al balcón cubierto del primer piso desde el que el paje dedicaría unas palabras a los niños antes de recoger sus cartas para los reyes.

Hicimos 2 o 3 simulacros de bajada para tantear el terreno, pero estaba claro que el tema no tenía más misterio para el Drecera, y menos para en Super Fango!!!. Como podemos ver en las fotos, el que escribe se dedicó más bien al reportaje fotográfico y a ayudar a lo que pudo sobretodo a la hora de recoger, y en Litus sirvió de chico para todo, asegurador oficial, modisto improvisado asesorando a nuestro partícular paje y hasta probador de pelucas.

Se tiene que decir en Fango se libro de milagro de que le cortásemos las greñas en un plis plas y a lo vivo, je, je. Con ese aire mezcla de Camarón y Príncipe de Bequelar que me lleva con las greñas últimamente, resultó que las greñas negras le sobresalían por encima de la peluca blanca oficial. Total, entre eso, que las mallas no llegaban, los patucos no eran compatibles con las botas de montaña, y que quedaban 10 minutos para que se produjese la bajada, al final, cuando surgió el problema greñil, la primera idea fue, nada le cortamos las greñas aunque sea con el Criquí o a mordiscos!!!!.

Al final triunfo el sentido común, más bien el del máximo afectado y su señora, je, je, y se soluciono el problema como buenamente se pudo. En fin, y en resumen, magnifico estreno de la temporada con la vertiente más humanitaria del Drecera.

Por supuesto, las mayores felicitaciones tienen que ser para el maestro Fango que está hecho un verdadero Show Man al completo!!!.



Por último, solo comentar que, como se puede comprobar en una de las fotos, en el concurso de culines que se montó en la expedición al Aconcagua, desde luego el d'en Fango, je, je, tendría algo que decir en el tema!!!!

Un abrazo familia Drecera.